Pocos productos han generado tanto entusiasmo en el mercado de los lentes como revestimiento antirreflejo (AR), una fina y delgada capa de película que se aplica sobre el lente para reducir reflejos y eliminar el deslumbramiento. Este tratamiento ofrece claras ventajas clínicas y estéticas para los pacientes, permitiendo al usuario ver más fácilmente a través del lente y a la vez llamar menos la atención. También el AR ofrece al óptico la oportunidad de aumentar su margen de utilidades.
Aquellas personas que manejan mucho de noche o los que tienden a ver rayos de luz y halos sobre objetos reflejados encuentran que el revestimiento AR reduce y les ayuda a distinguir imágenes com mayor claridad, disminuyendo de tal modo la fatiga visual. Gracias a que facilita la transmisión de luz mejora los contrastes, el revestimiento AR reduce las imágenes fantasma y distorsiones a menudo ocasionadas por los lentes de alto índice, facilitando así la transición del paciente a este tipo de lente.
lunes, 24 de noviembre de 2008
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